Cada ser humano nace como algo nuevo, como que no existía antes; como un ser distinto dotado de todo lo necesario para triunfar en la vida. Individualmente, cada persona puede ver, oír, tocar, gustar y pensar por sí misma. Además cada una tiene sus propias potencialidades, sus capacidades y limitaciones. Por derecho propio, cada una puede ser una persona importante, pensante, consciente y productivamente creadora; en una palabra, posee las palabras, posee todos los atributos necesarios para ser triunfador.
Pocas personas son totalmente triunfadoras o perdedoras, es una cuestión de grado. No obstante, una vez que el individuo se halla camino de convertirse en triunfador, sus posibilidades de serlo son muchas mayores.
Los triunfadores tienen diferentes potencialidades. Tener éxito no es lo más importante, sino es ser auténtico. La persona auténtica tiene la experiencia de la propia realidad al conocerse a sí misma y al convertirse en alguien sincero y sensible. La persona auténtica es la que realiza su propia unicidad, hasta entonces desconocida, y aprecia la unidad de los demás.El triunfador no consagra su vida al servicio de lo que imagina que debe ser, sino, por el contrario, se esfuerza por se él mismo y, como tal, no consume sus energías en representaciones dramáticas, ni en falsas pretensiones, ni tampoco en manipular o inducir a otras personas en sus propios juegos. El triunfador puede revelarse como realmente es, en lugar de proyectar imágenes que agraden, inciten o seduzcan a los demás, tiene conciencia de que existen una importante diferencia entre ser cariñoso y actuar cariñosamente, entre ser estúpido y actuar estúpidamente, entre ser inteligente y actuar inteligentemente, el triunfador no necesita esconderse detrás de una máscara, se despoja de sus propias imágenes irreales de inferioridad o de superioridad y no se deja atemorizar por la autonomía.
Cada persona tiene sus propios momentos de autonomía, aunque sean transitorios. Sin embargo, el triunfador puede mantener su autonomía durante periodos cada vez más largos, en ocasiones, puede fracasar pero, a pesar de ello, conserva la fe básica en sí mismo.
Un triunfador no se atemoriza de pensar por sí mismo, ni de usar sus propios conocimientos, puede distinguir entre hechos y opiniones y no pretende tener todas las respuestas. Escucha a los demás, evalúa lo que tienen que decir, pero se reserva el derecho de llegar a sus propias conclusiones, admira y respeta a otras personas, pero no se deja definir, abatir, limitar o atemorizar por ellos.
Un triunfador no practica el juego del “desamparado” como tampoco el de echar la culpa, por el contrario, siempre asume la responsabilidad de su propia vida. No otorga a nadie falsa autoridad sobre si, porque sabe que el es su propio jefe.
El triunfador posee un justo sentido del tiempo. Responde adecuadamente a cada situación, de una manera apropiada al mensaje enviado, y en todo caso preserva la importancia, el merito el bienestar y la dignidad de las personas con quien se comunica. Sabe que hay una oportunidad para cada cosa y un momento para cada actividad.
Para un triunfador el tiempo es valioso, por consiguiente, no lo malgasta. Vive aquí y ahora. Vivir el presente no quiere decir ignorar neciamente su pasado o desperdiciar la oportunidad de prepararse para el futuro, más bien como conoce su pasado, es consciente del presente y vive en él y espera el futuro con optimismo.
Un triunfador aprende a conocer sus sentimientos y sus limitaciones y no los teme, tampoco de deja intimidar por sus propias contradicciones o ambivalencias. Sabe cuándo está enojado y puede escuchar cuando los demás se enojan contra el. También pude dar y recibir afecto, o amar y ser amado.Un triunfador puede ser espontáneo, no tiene que responde de una manera rígida o preestablecida. Puede cambiar sus planes cuando es necesario. Al triunfador le entusiasma la vida, goza con su trabajo, el juego, la comida, las otras
personas, el sexo y la naturaleza. Goza de sus triunfos sin sentimientos de culpabilidad, y de las realizaciones de los demás sin envidia.
¿Pero que pasa si no tenemos todo lo necesario para ser triunfadores? ¿Quiere decir que no podemos serlo? ¿Qué podríamos hacer para ser un triunfador?
Para responder a esas preguntas aquí les mencionamos algunos instrumentos para el cambio.
Cuando una persona quiere descubrir el porque de su “mala racha” y cambiarla es cuando quiere parecerse más al triunfador que ha nacido para ser, puede recurrir a experimentos de tipo gestalt o al análisis transaccional para realizar el cambio. La terapia gestalt y el AT son dos enfoques psicológicos de los problemas humanos. El doctor Frederick Perls dio nueva vida a los experimentos de tipo gestalt, el análisis transaccional fue desarrollado por el doctor Eric Berne.
En cuanto al Análisis transaccional es un enfoque racional encaminado hacia la comprensión del comportamiento, con base en la suposición de que cada individuo puede aprender a confiar en sí mismo, a pensar por sí mismo, a tomar sus propias decisiones y a expresar sus sentimientos.
Berne dice que un objetivo importante del AT es establecer la comunicación más franca y autentica posible entre los componentes afectivos e intelectuales de la personalidad. Cuando esto ocurre la persona puede emplear tanto sus emociones como su intelecto de una manera equilibrada y no unas a costa del otro.
6 comentarios:
muy interesante, como dicen a veces todo depende de nosotros,de nuestras habilidades, es cierto que tambien influye como nos han criado y como nos han enseñado afrontar las dificultades, pero tambien nosotros somos los que construimos nuestra propia vida, así que debemos pensar que nos conviene y de que forma podemos superarnos, yo personalmente opino que no existe la suerte, y que las oportunidades hay que aprovecharlas al máximo,solo de esta manera podremos lograr una realizacion como personas y superaciom personal.
yo leí este libro hace muchos años y me sirvió muchísimo.
Nuestro procer decía "nada debemos esperar sino de nosotros mismos" (José Gervasio Artigas) y es así...
No deja de llamarme la atención que todas las fotos de supuestos triunfadores en el blog son de HOMBRES de TRAJE Y CORBATA, ojo! triunfadores podemos ser TODOS, incluso mujeres y trabajadores de todos tipos, niños, jvenes, adultos y viejos... ojo con los esteriotipos.
Saludos, y sigan así, desde Uruguay, Cris: una triunfadora en el camino d la búsqueda.
jamàs he leìdo el libro
y me interesaria leerlo
este fragmento... estuvo en mi extra de desarrollo del potencial para el aprendizaje y la verdad me encanto porque fue un momento de .. "eso es cierto.." y me senti alentada a seguir...
me describiò bien el texto y recomendable si no estas en buenos caminos yo diria que .. se los dejaran leer a todas las personas existentes en esta tierra y de que se mejoraria ... se mejoraria.
porque aunque no lo crea nadie "todos nacimos para triunfar y ese es nuestro verdadero objetivoen la vida...."
Yo creo que todos somos seres potencialmente destinados a ser superiores fuimos creados a imagen y semejanza de Dios. ¿que nos puede detener en la búsqueda de una vida maravillosa? , tenemos que despertar de ese adormecimiento que traemos desde los principios de nuestros dias y solo asi estaremos en el camino de la plenitud...
Muy interesante esta información...tendre que volver a leer este libro...en mi trabajo lo preste y nunca me lo devolvieron...actualmente tengo un proyecto en mente y creo que me serviría mucho reencontrarme con esas letras para aumentar mi creatividad...
Publicar un comentario