En nuestro cuerpo ocurren muchas auto regulaciones y una de las características básicas es el equilibrio, esto es también conocido como "Homeostasis".
Yendo al plano físico por ejemplo encontramos que la mucosa gástrica soporta un límite de acidez; sobrepasado este límite puede romperse, produciéndose heridas en ella que son las llamadas úlceras. La regurgitación o reflujo gástrico (acidez) se produce cuando la digestión no es la apropiada, es decir, la función digestiva no se realiza con normalidad, esto puede ser debido a un exceso de ácidos en el estómago. El ácido produce ardor porque quema a la mucosa gástrica. La sensación de acidez no es más que el dolor, el síntoma de que algo anda mal. El organismo tiende a equilibrarse y emplea a los minerales como el sodio, potasio, hierro, magnesio, calcio para neutralizar el ácido. Las consecuencias de esto es que hay un descenso de las reservas alcalinas, produciéndose un debilitamiento general.
Esto es un claro ejemplo de la sabiduría corporal que todos poseemos; ahora se preguntaran el porque se comienza este articulo con algo totalmente físico y no psicológico, es pues que de esta forma es más fácil entender algo que todos nosotros hemos pasado y que en muchas ocasiones no nos damos cuenta.
Teniendo este ejemplo como base, la autorregulación es el proceso mediante el cual un organismo identifica cuales son las necesidades que tiene en ese momento y las satisface, cuando pasamos por alguna experiencia o suceso recurrimos a nuestros estilos de respuesta almacenadas que poseemos, es conocido esto también como el “auto apoyo”, sin embargo en muchas situaciones todo lo almacenado no es suficiente para responder adecuadamente a esta situación y es ahí en donde se puede generar un síntoma.
La figura que se forma durante la autorregulación es:
Cuando por ejemplo ante determinado hecho aparece la necesidad de llorar, una persona puede hacerlo y otra no, en el caso de la segunda persona esto puede darse por la idea introyectada (no propia sino adquirida de otra persona) de que los hombres no lloran o del de que llora es débil, es ahí en donde se interfiere la necesidad y aparece el síntoma de dureza y rigidez, que es la que encubre la necesidad de llorar o de recibir un abrazo.
Un punto importante de la autorregulación es la auto curación, que es el modo que cada uno en forma particular encontramos para solucionar el problema y tener menos sufrimiento; Cabe resaltar que es importante hacer la diferencia entre un encubrimiento de emociones y una adecuada resolución que en muchos casos y muchos terapeutas pueden confundir.
Para lograr la madurez hay que discriminar y conocer, esto es debido a que tanto el organismo como su ambiente son inseparables y la separación de estas dos partes puede traer muchos problemas psicológicos y/o el bloqueo en la realidad de muchas necesidades.
BIBLIOGRAFIA:
. Salama H. (2003). “Psicoterapia Gestalt –proceso y metodología”. Editorial: Alfaomega. Mexico DF.
. Sanchez A. (2008). “Un Primer contacto con la Gestalt”. Lima: Perú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario